Caroline Cross

Caroline Cross nunca olvidará la primera vez que leyó una novela Silhouette Deseo. Lectora empedernida de todos los estilos, excepto de novelas románticas, se sintió atrapada por la magia de dos personas que se enamoran perdidamente la una de la otra y luchan contra todo para defender su amor.
Fue una experiencia a la vez conmovedora y emocionante y Caroline hace todo lo posible para recrearla en sus propias novelas.
Caroline nació en el estado de Washington. Una enamorada de los caballos desde los dos años, volvió locos a sus padres durante ocho más para que le compraran uno. Al final, los convenció y pasó los años siguientes compitiendo por todo el país, soñando e inventando historias cuando no estaba entrenando o participando en competiciones hípicas.
Más tarde fue a la universidad y tocó muchas materias, pero sin decidir lo que quería hacer con su vida. Después de graduarse en Ciencias Políticas (una elección muy práctica, desde luego), se dedicó a diversos trabajos, desde colaborar en el proyecto del primer diskette a ser ayudante del director de una tienda de telas.


Se casó con un hombre muy especial un caluroso día de verano y durante los años siguientes tuvo dos hijas. Cuando las niñas pasaron la varicela, primero una y luego la otra, se encontró a sí misma en casa con nada que leer excepto las instrucciones de la lavadora.
Una amable vecina le llevó una bolsa llena de novelas y así fue como conoció el género romántico. Enganchada desde el primer día, un mes después decidió ponerse a escribir. Tres años más tarde, consiguió vender su primera novela.
Caroline se sintió feliz (por no decir aliviada, como su familia) de haber encontrado su verdadera vocación. Y es un sentimiento que comparten sus lectores y críticos en todas partes del mundo. Fue muy emocionante para ella ganar el premio de la Asociación de escritores americanos de novela romántica en 1999 por The notorius groom. También ha recibido el premio de la crítica de la revista Romantic Times por una de sus obras, publicada por Silhouette Desire y ha sido dos veces elegida por los lectores como ganadora del premio Emerald City.
Ahora vive en Seattle con su marido y sus hijas, un perro muy grande y peludo y un caprichoso gato siamés.
Para Caroline, cada nueva novela es una aventura. Le gustan los protagonistas fuertes y seguros de sí mismos, las heroínas con valor para enfrentarse a todo, la aventura de dos personas especiales que deciden compartir su vida y, sobre todo, los finales felices.